martes, 23 de febrero de 2021

Nabis

 



                                                   Sérusier

La contribución de los Nabis a las artes decorativas, aunque esencial, aún es poco conocida. La cuestión de lo decorativo como principio fundamental de la unidad de la creación se impuso en el momento de la formación del grupo a finales de la década de 1880 entre estos artistas que querían borrar la frontera entre las bellas artes y las artes aplicadas.

                                                      Emile  Bernard

Verdaderos pioneros de la decoración moderna, Bonnard, Vuillard, Maurice Denis, Sérusier, Ranson y Vallotton defendieron un arte estrechamente vinculado con la vida. Crearon obras originales, alegres y rítmicas, destinadas a decorar los interiores contemporáneos, en reacción a la estética del pastiche que estaba a la moda en ese momento.
                                                   Bonnard

 El arte decorativo de los Nabis no responde a ninguna doctrina estética preexistente, sino que expresa la fantasía imaginativa de los artistas y la audacia de su investigación formal. Esta experiencia artística total se basa en la liberación de las técnicas y la influencia de Japón. Fascinados por los grabados japoneses descubiertos durante una exposición en la Escuela de Bellas Artes de París en 1890, los Nabis se inspiran en estas imágenes planas para interpretar la realidad. Al proscribir la imitación ilusionista y afirmar la bidimensionalidad natural del soporte, desarrollan un arte ornamental con formas simplificadas, líneas flexibles y motivos sin patrón que saturan el espacio. Sus composiciones se caracterizan por el uso de colores brillantes, líneas onduladas, una perspectiva sin profundidad, y formas subrayadas por un borde, para diferenciarlas aún más del fondo. Los Nabis recibieron varios encargos para decorados privados o para la galería de Art Nouveau

 

 Recepción

jueves, 18 de febrero de 2021

ESCUELA DE PARIS

  


                     Amedeo Modigliani, Retrato de Paul Guillaume

"Escuela de París", nombre inventado por el crítico de arte André Warnod para designar este grupo juntando artistas esencialmente extranjeros, atraidos por la intensa actividad intelectual y artistica en el París de esta época.

                                     Soutine

Aunque la concurrencia de artistas Judíos en París y las influencias extranjeras que comenzaron a trabajar en París en 1925, al principio, causaron un profundo resentimiento y actitudes nacionalistas en defensa de los artistas nacidos en Francia como André Derain o André Dunoyer de Segonzac, considerados como mantenedores de la pureza y continuidad de la tradición francesa, despues de la Segunda Guerra Mundial estas actitudes fueron consideradas antisemitas y el término ESCUELA DE PARIS, incluía artistas extranjeros y franceses que trabajaban en París

                                       Maurice Utrillo

Este grupo de artistas trabajaron en París en el período de entreguerras, vinculados a diversos estilos artísticos como el posimpresionismo, expresionismo y el surrealismo. Artistas que dieron origen a diversos movimientos de vanguardia como el fauvismo y el cubismo.

martes, 2 de febrero de 2021

Chechu Álava

 


Nació en Piedras Blancas Asturias en 1973, se licenció en Bellas Artes en la Universidad de Salamanca. Obtuvo becas del Ministerio de Cultura, en París, y del Parlamento Europeo en Austria; cursó la beca Erasmus en la Gerrit Rietveld Academie de Amsterdam. Álava se dio a conocer a través de la Muestra de Artes Plásticas de Asturias. En 2008 obtuvo el premio de Pintura de la Junta General del Principado de Asturias, también fue premiada en el Certamen Nacional de pintura de Luarca. Su carrera profesional comienza con una exposición de 1994, desde esa primera muestra ha intervenido en más de un centenar de exposiciones individuales y colectivas en distintas capitales de Europa.

Álava es eminentemente pintora y en sus obras a menudo aparece la mujer como protagonista. Mujeres envueltas en un manto de niebla que parece recordar ensoñaciones o recuerdos difusos, a veces reconocibles aunque no necesariamente. Se trata de retratos aparentemente sencillos, pero muy complejos en su realización pictórica ya que no es el tema, ni la técnica, ni el parecido lo que hace que la obra tenga esa relevancia tan peculiar que les caracteriza.

En una reciente entrevista Chechu ha manifestado que en sus cuadros hace una especie de homenaje a mujeres notables, con vidas y capacidades sobresalientes de la reciente historia de Occidente. Mujeres transgresoras en cierto modo, mujeres cuyas vidas escapan a los cánones severos o moderados de la moral tradicional o tal vez políticamente correcta.

En sus obras se respira la peculiar tranquilidad de un instante detenido en el tiempo, de un momento meditado. Posiblemente de una reflexión hacia la propia subjetividad de la artista, que no cesa de buscarse a sí misma en sus piezas y resulta admirable su capacidad para convertir la pintura en un territorio de investigación inagotable. En un vistazo a su página web podemos reconocer su especial interés en homenajear a artistas como Lee Miller, Frida Khalo, Marga Gil Roësset, Tina Modotti o sus famosos retratos de Camille Claudel, pero Álava nos lleva mucho más allá, en su página conviven con actrices, escritoras, activistas, pensadoras, así como con situaciones y espacios no necesariamente de carácter feministas.

 

 http://www.chechualava.com/