viernes, 11 de junio de 2010
Lo kitsch y los pongos
EJEMPLOS DE PONGOS
A propósito del articulo siguiente he reflexionado sobre los "pongos" ¿Quien no tiene alguno? Yo tengo uno en la nevera que se ha convertido en un "fetiche". Es un regalo de mi hija, esta que pinta, Hey Juddy. Es un platito, muy pequeño (gracias a Dios) con una bailarina flamenca, con su vestidito de tela y todo. Me lo trajo de regalo, con mucho cariño, de un viaje de estudios que hicieron con el instituto a Andalucía. Ella controla, a menudo, si está en su sitio, y yo le aseguro que allí morirá.
Pero los pongos peores son los de los amigos. Recuerdo uno que me trajo Paulino- aún no entiendo como pude quedarme con una cara "neutra" cuando lo vi. Mientras me lo daba hablaba y hablaba. Yo paralizada escuchando. Lo había hecho un amigo suyo artista...yo no podía apartar los ojos de aquel "bicho casa" de cuyas ventanas salían culebras. Lo cogi, le sonreí con agradecimiento y cuando se fue pensé que podía hacer con aquella cosa. Tirarla no podía porque tendría que ponerla en un sitio de honor cuando el viniera a casa. Despues de rodar un tiempo por la casa un día decidí ponerla fuera...a veces me roban plantas, "a lo mejor a algún caco le gusta y se la lleva", pensé...pero na- LOS CACOS SE HAN VUELTO SUPERFINOS AHORA- y la "estatua" allí estaba IMPERTERRITA.
Nos acostumbramos a ella y ya casi la olvidamos hasta que un dia... vino mi madre a casa y...con cara de asombro dijo ¿Y eso tan bonito? Corri rauda y veloz a buscar una bolsa y sin dejarla arrepentirse de sus palabras, la obligué a llevarsela
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