Ferdynand Ruszczyc

Ferdynand Ruszczyc (1870-1936), destacado pintor, diseñador gráfico, decorador teatral, pedagogo que ha dejado profundas huellas en el arte y en la vida cultural y social no sólo de Bielorrusia, sino también de Rusia, Polonia, Lituania y otros países europeos. Ferdynand Ruszczyc nacido en 1870 en una finca de los Bogdanov, ubicada en el antiguo municipio Oshmiany, provincia Vilnia (actualmente el pueblo Bogdanovo, municipio de Volozhin, provincia de Minsk) en una familia noble. Pasó su  infancia y juventud  en la ciudad de Minsk. Estudió en la escuela primaria local  y  despues tomó clases de pintura en el taller del reconocido pintor Kuzma Yermakov. 

Más tarde Ferdynand Ruszczyc comenzó a cursar estudios en la Academia de Bellas Artes de la ciudad rusa de San Petersburgo. Su primer maestro fue Iván Shishkin. A partir de 1895 tomó clases en el taller de Arkhip Kuindzhi, en donde estudiaban muchos pintores como: Arkadiy Rylov, Nikolay Roerich, Vilhelms Purvītis y Konstantín Wroblewski, entre otros. 

En 1897 celebró su primera exposición, sus pinturas tuvieron mucho éxito. Uno de sus cuadros, “Primavera”, fue adquirido por el famoso coleccionista ruso de aquellos tiempos, Pável Tretiakov.  Otra pintura de Ferdynand Ruszczyc, “Molino de invierno”, fue adquirida por el famoso coleccionista y mecenas ruso, Savva Morózov. Los recursos –obtenidos tras la venta de los cuadros– permitieron al pintor emprender el viaje de dos meses por los países de Europa Occidental. Ferdynand visitó Alemania, Francia, Bélgica, Austria, Suiza e Italia, entre otros. 

El pico de la trayectoria artística de Ferdynand Ruszczyc coincidió con su regreso a su finca familiar, cuando ya había ingresado en  la Academia de Bellas Artes de San Petersburgo. Los años  pasados en el pueblo Bogdanov– se cree que fueron los  más fructíferos. Allí en 1898, el maestro ha comenzo a pintar uno de sus cuadros más famosos, “Tierra”, que  esta ahora en  el Museo Nacional de Varsovia.  tambien pintó allí  sus maravillosas obras –“Útima nieve”, “Balada”, “Kreva”, “Molino”, “Orillas de Vileika”, “Arroyo forestal” y muchas otras– que fueron dedicados a la naturaleza bielorrusa. 

 A la iglesia local el maestro  dedicó varias obras suyas, haciéndo imagenes desde diferentes ángulos. La iglesia del Arcángel Miguel –presentada en su cuadro– es un excelente ejemplo de la arquitectura de madera bielorrusa de la segunda mitad del siglo XVII. Desafortunadamente, este monumento arquitectónico no se conserva. Durante la Segunda Guerra Mundial fue quemado junto con otras valiosas obras del patrimonio cultural. Sin embargo, las fotos de la iglesia –sacadas por el amigo de Ferdynand Ruszczyc, Jan Bulgákov– y el cuadro del artista nos permiten percibir todo el ambiente de un cálido día primaveral y sentir una unidad eterna entre la tierra, luz, gente y el cielo que, como si salieran del lienzo. 

Las pinturas de Ferdynand Ruszczyc han sido expuestas en diferentes galerías de San Petersburgo, Moscú, Varsovia, Vilnia (actualmente Vilnius — Aut.) y París, entre otros. En 1921 el pintor fue galardonado con la orden la Legión de Honor francesa, por su importante aporte a la cultura. Los críticos de arte de aquel entonces destacaron su excepcional don de buen colorista, a su vez los críticos modernos merecidamente lo llaman “maestro de los cuatro componentes”. Además de demostar importantes éxitos en la pintura de caballete, Ferdynand Ruszczyc ganó fama de muy buen decorador de las obras teatrales, diseñador gráfico  de libros e ilustrador de revistas. También hacía bocetos de medallas y banderas, disfraces y carteleras teatrales. No es posible imaginar la vida cultural de Vilnius del período de 1910 a 1920 sin emblematíca figura de Ferdynand Ruszczyc. Además de eso,  fue presidente de la comisión para la protección de antigüedades, viajó mucho por Bielorrusia e hizo bocetos de los antiguos castillos. 

Los contemporáneos de Ferdynand Ruszczyc lo recordaban como  un excelente pedagogo. Trabajó en la Escuela de Bellas Artes de Varsovia, en la Academia de Bellas Artes de Cracovia y participó de modo activo en la reconstrución de la Universidad Nacional de Vilnius. 
Ferdynand Ruszczyc falleció el 30 de octubre de 1936 en Bogdanov y fue enterrado en el cementerio municipal. 
A esta altura, sus pinturas son verdaderas joyas de los museos de Polonia, Lituania, Rusia, así como de las colecciones europeas y norteamericanas, incluso de las privadas.


Museo Nacional de Bellas Artes de Bielorrusia