Vilhem Hammershøi

Vilhem Hammershøi

(1864-1916) Atrapado por la luz del norte


Cuando se presentó la primera vez en Charlottenborg en 1885 con Retrato de una joven, (Colección Hirschsprung, Copenhague), Hammershøi ya había encontrado el estilo que caracterizaría la totalidad de su obra: una composición arquitectónica rigurosa y una paleta reducida, enteramente dominada por los grises. Durante toda su vida,

Hammershøi se consagró a unos motivos severamente limitados que abarcaban diversos interiores de su hogar, retratos de familia y amigos, así como paisajes y cuadros con motivos arquitectónicos. La luz y el cielo, elementos que ocupan un lugar esencial en la obra de Hammerhøi, adquieren una consistencia casi física. Hammerhøi se hizo célebre, sobre todo, gracias a sus cuadros de interiores sencillos y escasamente amueblados. A menudo están desiertos, aunque en algunos se aprecia la silueta de una mujer, casi siempre inmóvil y con el rostro girado.

Durante la última década del siglo, Hammershøi realizó una serie de cuadros de temas arquitectónicos, sobre todo de los palacios de Amalienborg y de Christiansborg, que, al igual que sus paisajes de Selandia, están envueltos por una ligera bruma. Su pintura distinguida y elegante ocupó una posición bastante aislada, vista en relación a la que desarrollaron los artistas daneses de su época que, en su gran mayoría, eran naturalistas. Hammershøi participó, en 1891, en la fundación de Den Frie Udstilling (La Exposición Libre).

Vilhelm Hammershøi durante toda su vida se circunscribió a unos cuantos motivos pictóricos: retratos de familiares y amigos cercanos, pinturas de interior de su hogar, edificios monumentales de Copenhague y Londres, y paisajes de Selandia.

Los mismos motivos reaparecen una y otra vez. No hay acción en sus cuadros; a éstos los impregna una actitud fundamental y determinada: tras la calma extrema y la inmovilidad, se percibe el acecho de un elemento indefinible y amenazador. Su escala de colores es muy limitada y la domina una variación de tonos grises.

Hammershøi fue alumno en la Academia de Arte en Copenhague de 1879 a 1884 y, en 1883, fue además alumno de Krøyer en la Escuela Libre de Estudios para Artistas. A su debut en Charlottenborg en Copenhague, en 1885, había ya encontrado su forma de expresión.

Su arte despertó gran admiración, pero también indignación en los círculos más conservadores de la vida artística, siendo rechazados sus trabajos en 1888 y en 1890 por el comité de censura de las exposiciones de la Academia. Ese rechazo fue uno de los motivos por los que, en 1891, y a iniciativa de Johan Rohde, se organizara la Exposición Libre. No fue sino hasta después de 1900 que recibió un reconocimiento oficial. Hammershøi iba frecuentemente de viaje, especialmente a Paris, Londres, Holanda e Italia. No obstante, y a pesar de que se podía identificar rasgos familiares en la pintura internacional de la época entre diferentes artistas, especialmente J.M. Whistler, no es posible encontrar prototipos propiamente dichos para el arte de Hammershøi.


jordan shoes ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Vilhem Hammershøi":

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Publicado por jordan shoes para ines a las 3 de enero de 2009 8:32